Si lo observo, como prototipo, este modelo es una especie de vehículo fórmula X. Una nave con doble asiento, que sale y vuelve a su lugar de ensamblaje, como si estuviese armando su panel de controles con múltiples dispositivos; probando el chasis, la carrocería, su amortiguación y su motor de desplazamientos en el tiempo y el espacio…
Coordinar todo este trabajo es complejo, porque además de ir despejando rutas en sus recorridos, por las variadas disciplinas de la noosfera, su diseño concreto virtualmente va sobre la marcha, ensayando recursos teóricos y técnicos, que van emergiendo, a veces hasta como por asalto, tomando su propio tiempo de prueba y asimilación.
Similar a la maquinaria instalada en el Delorean de "Regreso al Futuro"… entro a diario al taller, trajeado prácticamente de mecánico-diseñador múltiple, entre lo dado y lo que voy descubriendo.
Un toquecito por aquí… otro por acá. Pruebas y cambios en el formato y la tipografía; en la modelización, en las ideas vislumbradas; en la evaluación de las noticias y temas de todo tipo. Traspasando umbrales…
Prácticamente como un proyectil para recorrer el ciberespacio –que no es ni la sombra de lo que será, pues todo varía y cambia vertiginosamente en la vanguardia de esta revolución mundial; sobre todo si uno piensa en los términos del desplazamiento espacio-temporal a partir de las ficciones de H.G. Wells y aún más allá de las dimensiones a través del Tardis del Dr. Who por el presente, futuro y pasado, a lo largo y ancho del espectro… por la autopista mundial de la información.
Poco a poco van apareciendo en este proyecto sus canales y galerías sobre la marcha. Hace más de un par de años concebí el canal de Cyberficción, pensando estrenarlo con biografías. Luego procedí a proyectar otro canal, sobre ética y solidaridad…
En este post expongo escenarios heurísticos. Una de las características de este desarrollo es la espontaneidad, la serendipia, en la elaboración y corrección de estos borradores… en la invención y estructuración de este blogzine de nuevo tipo. Más abajo, hago una aproximación rasante sobre la necesaria soledad en el dominio de la ficción –por la naturaleza de este arte– que ahora se realiza no sólo con lápiz y papel o por medio de un teclado, sino más allá, en algo mucho más complejo… el hypermedio, con sus novedosas recursiones en línea, vía Internet.
Se trata de improvisaciones, errores y correcciones, mientras van tomando forma las temáticas de fondo. Tras las secuencias de estos posteos, l@s lector@s pueden ir percibiendo en lo narrado y en el ensayo, el manejo de tales recursos.
Información, diálogo, infografía
El canal de Actualidad –el parabrisas de este vehicular blogzine– ha ido cobrando forma y transparencia, luego de idas y vueltas entre otros avatares, desde la primera versión del viejo Blogger y la posterior versión Blogger 2, a la que aún le falta mucho para facilitar la dinámica que se percibe que logrará en el corto plazo. Para ello, lo primordial, es disponer de tiempo. Las nuevas versiones del OS Maverick o El Capitán de Apple presentan fallas… hay aplicaciones, desarrollos de punta por integrar en el directorio; hay cambios en las computadoras –cada vez más potenciadas– y las pruebas que, por ejemplo, se realizan en la Red con aplicaciones como Google Maps, Scketch Up, Picasa, para mayor provecho de los avances de las plataformas de Linux, Apple y Microsoft en fases de desarrollo que seguirán a lo largo del siglo 21; equipos y aplicaciones con los que hay que saber seleccionar y practicar con ellos, para ser usuarios expertos.
Voy conectando CyberScritor con otras páginas en la red superficial, utilizando máquinas de rastreo (search engines), que suman, entre tres conocidos directorios de blogs, alrededor de 90 sitios. Dentro de poco, lanzaré el prototipo a fondo por las avenidas y urbes del mundo virtual global hasta la red profunda. No sólo nos entenderemos en español, el radio de difusión de CyberScritor se expande con la traducción automática. La Red Mundial (www) se produce en inglés su mayor porcentaje.
CyberScritor, proviene o surgió en otro proyecto previo a TwittNET, El Arsenal, que también ha sido una experiencia en plan de pruebas con los rastreadores de Google. Es satisfactorio comprobar que sus páginas se han visto en Japón, Canadá, Chile, Argentina, Brasíl, Inglaterra, Australia, Francia, Italia, México, y en lugares de Estados Unidos: California, Texas y Nueva York… y por el resto del mundo con menor frecuencia. Por ello, este nuevo prototipo no ha sido proyectado en el aire. Su andén y su taller contienen un laboratorio lleno de instrumentos probados.
Algunos temas a nivel de ensayo van saliendo en el corto plazo. Esta sección de proyectos y productos de cyberficción es lo suficientemente informal como para experimentar con el género de la Ciencia Ficción. Quizás, por haber sido el punto de partida, la primera plantilla inicialmente elegida para el diseño y la primera imagen de este canal lucía como un bastión con vista a un horizonte invisible… liminal, con salida a los corredores de un inmenso y etéreo edificio y sus umbrales a través de los cuales la vida se transforma en sus recorridos –teniendo en cuenta su dialéctica existencial… pues uno, mientras vive-muere-vuelve.
Hay más vidas donde siempre habrá cosas por hacer y respuestas a la espera, forjadas en el impulso… Por aquí uno anda más de su cuenta… lugareño, hogareño en shorts, ligero de ropaje, caracterizaciones y disfraces, para descargar más libre las ideas; para imaginar y decir cosas relativamente sueltas… Después de todo, esto es un blogzine –una vía por donde uno escapa, del periodismo de los temas y asuntos ideologizados, a través del filosofar concreto por el corredor donde se deshace lo envoltural del fénix, la estética envuelta en papel celofán y el diseño de las meras cosas al carecer de sentido.
Hablando de respuestas a la espera y relativamente motorizadas, abordo en esta y otras páginas, algunas de ellas en una aproximación a la visión de mundo del cyberescritor, en cuanto a la creencia, el saber, la tecnología, el diseño, la ficción y lo desconocido, piel adentro con júbilo manifiesto a través del propio hacer…
–¿Terminaste?
–Hum… Andabas tomando sol…
–Ajá. Sola.
–Casi termino. Me falta relacionar esta sección con un par de enlaces; buscar e insertar algunas imágenes en el texto.
–Según lo que vienes diciendo de la hiperescritura y la ciberficción, deberías mostrar algún ambiente, para visualizar…
–¿Como éste?
–Camarada… Usted se propasa con ese diletantismo de club pequeño-burgués…
–Ja! Nada que ver. Nada de reacciones egolátricas. Aquí, todo es gratuito.
–No dejan de ser proyecciones de aspiraciones pequeño-burguesas, Víctor…
–De ninguna manera. Soñar no cuesta nada y tú lo sabes, mi Alba mañanera. Además, una cosa es soñar libremente y otra mostrar a consciencia niveles de calidad de vida que inmensa mayoría no ha podido ni puede ni podrá disfrutar siquiera en su propia cultura. Si lo piensas bien al menos puedo aspirar a compartir ideas, imágenes. ¿No es por ahí que comenzamos a socializar entre las contradicciones? ¿A orientar y cambiar el modo de producción de las cosas, de las relaciones humanas y de la vida en general más llevadera?
–Muchos no lo ven ni pueden verlo así, ni se lo permiten ellos mismos…
–Desactivemos entonces los equipos automáticos, apaguemos los monitores, los celulares, las cámaras de video, las computadoras… clausuremos Internet…
–Esteee… ¿vas a terminar pronto?
¿Qué tal esta vista de esparcimiento y tranquilidad…?
–¡Termina ya! Te espero ahí afuera en una de esas sillas, mirando al horizonte; esperando que me cuentes cómo te fue en Guayana, durante la escapadita esa en la avioneta de…
–Hum… Okey…
–¿Sabes lo que provoca ahí afuera…?
¿Un par de piña-coladas?
–Si va!
–Toma. Ordena al droide que las prepare y las sirva dentro de un rato.
–Definitivamente. Esta ilimitada dimensión digital nos está matando… de multi-sensorialidad.
–Y de comunitaria solidaridad. Nunca te olvides de eso…
